
Leonora Carrington una pintora surrealista nacida en Inglaterra y nacionalizada mexicana es conocida por sus obras que mezclan la autobiografía y la ficción, lo cotidiano y lo mágico. Sus obras están repletas de seres fantásticos, a menudo animales de la mitología celta, y participan plenamente de los postulados surrealistas. Ejemplo de ello es su obra Autorretrato.
Desde muy temprana edad, Carrington comenzó a estudiar pintura y tuvo acceso a algunos de los mejores museos de arte del mundo.
Se relacionó con los artistas surrealistas más prominentes de su época, entre ellos Max Ernst, Remedios Varo, André Breton y Luis Buñuel.
En México desarrolló plenamente sus dotes artísticas y formó una familia con el fotógrafo húngaro Emir Weisz, con quien tuvo dos hijos.
En el año 1963, Leonora Carrington creó, como parte del proyecto museográfico para el Museo Nacional de Antropología de México, el mural El mundo mágico de los mayas, en el que interpreta la cosmovisión de los pueblos tzotziles y tzeltales de las montañas del estado mexicano de Chiapas.

El resultado de su mural fueron una mezcla de imágenes provenientes del Popol Vuh, libro sagrado de los antiguos mayas-quichés, con observaciones directas de la sociedad tradicional maya contemporánea y algunos elementos de la Mitología celta, utilizados en gran parte de su producción artística. Cada parte del mural tiene su simbología y los animales desempeñan un papel central dentro de la iconografía de esta pintura mural, así como en toda la pintura de la artista.
Falleció a los 94 años en la Ciudad de México el 25 de mayo de 2011 y fue enterrada en el Panteón Inglés.