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Como hechos por un alquimista, las mezclas de concentrados de flores, condimentos, maderas, hierbas y frutas, entre tantas otras cosas, nos pueden crear aromas irresistibles. Estos aromas pueden destacar aspectos de nuestra personalidad.

Si hacemos la combinación correcta entre nuestra elección de perfume y el cómo este perfume se adecua a nosotros, estaremos expresando una parte de nosotros mismos.

Los perfumes se clasifican en familias olfativas.

Frescas: estas mezclas de aromas suelen ser sutiles, discretas y juveniles. Tienen notas cítricas como el limón, naranja, bergamota y también herbales como el té verde y flores suaves. Este tipo de perfumes son recomendados para las mujeres activas, alegres y juveniles, perfectos para el trabajo ya que no son olores tan fuertes que inundan la habitación, nos dan una sensación de frescura, de sentirnos como recién bañadas.

Florales: en esta familia olfativa vamos a encontrar que la mezcla está basada más en las flores y se seleccionan las que tienen más potencia de olor y se combinan tanto con aromas frutales o aromas amaderados. Generalmente los aromas son más intensos si la mezcla es con maderas y son más juveniles si están mezclados con aromas frutales. Este tipo de perfumes denotan más fuerza y pueden llegar a ser olores penetrantes que demuestran un carácter enérgico y elegante.

Orientales: en esta familia encontraremos mezclas de especias, generalmente picantes que dan un toque de misticismo a la fragancia y combinan perfectamente con aromas florales y amaderados. Este tipo de olores nos hace pensar en fechas especiales porque tienen un carácter profundo y soñador, son aromas perfectos para utilizar en una ocasión especial, en salidas nocturnas o en fiestas.

Cada perfume tiene características especiales y lo más recomendable es usarlos y decidir con cuál nos sentimos más cómodos y cuáles en definitiva no corresponden con nuestra personalidad. Otro aspecto es valorar qué tanto nos fija, ya que, según nuestro ph en combinación con el perfume, puede durarnos poco o mucho.

Yo lo que hago es ir a las perfumerías y oler en los papeles muestra los aromas que me llaman la atención. Después elijo dos, que aplico uno en cada brazo, así durante el día voy percibiendo cómo se mezcla con mi ph y qué tan cómodo me siento con el olor. De esta forma selecciono los perfumes que se adaptan a mis gustos y resultan en una buena elección y en una compra inteligente.

 

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