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Tanto hombres como mujeres pueden atravesar por etapas en las que sientan poco deseo sexual y por ello no tengan ganas de mantener relaciones sexuales. Esta falta de deseo sexual puede tener causas muy diversas, desde situaciones cotidianas a factores físicos o psicológicos.

En ocasiones no se trata solamente de un problema en específico, sino que también puede deberse a una combinación de factores las que esten causando el problema en la persona.

Las causas de la falta de deseo sexual

  • La relación de pareja tiene mucho que ver con el deseo. Si uno de los miembros siente que ya no hay intimidad con la pareja, no se siente bien en la relación, ya no siente atracción por su pareja, o hay distancia emocional, así como discusiones, peleas, son factores que pueden disminuir el deseo. Es necesario buscar conexión con la pareja, resolver conflictos, buscar una mejor comunicación y trabajar en la confianza.

  • Problemas mentales como la depresión, la ansiedad, el estrés, baja autoestima, antecedentes de maltrato físico o abuso.

  • Problemas psicológicos, crisis personales, insatisfacción, atravesar por situaciones difíciles en la familia, inseguridad laboral, son factores que afectan el deseo sexual.

  • El estilo de vida. Es posible que un vaso de vino te haga sentir apasionado, pero beber mucho alcohol puede afectar tu deseo sexual. Lo mismo sucede con las drogas ilegales. Además, fumar disminuye el flujo sanguíneo, lo que puede disminuir la excitación.

  • Factores físicos como enfermedades y cierto tipo de medicamentos. Muchas enfermedades no sexuales pueden afectar el deseo sexual, como la artritis, el cáncer, la diabetes, la presión arterial alta, la enfermedad de las arterias coronarias y las enfermedades neurológicas. Así mismo cierto tipo de medicamentos recetados, en especial los antidepresivos llamados «inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina», disminuyen el deseo sexual.

  • Cambios hormonales como la menopausia, el embarazo o la lactancia pueden modificar el deseo sexual.

Cuando el problema del deseo sexual se deja pasar y no se resuelve, puede hacerse un problema más grande y afectar gravemente la relación de pareja, por lo que es importante buscar soluciones o acudir a un profesional.

 

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