El que los niños coman todo tipo de alimentos es una suerte que muchas mamás quisieran. Pero cuando nuestro hijo prefiere solo ciertos alimentos y otros los rechaza, lo mejor es ir paso a paso enseñándole hábitos de alimentación saludable sin obligarlo.
¿Qué podemos hacer para que pruebe nuevos alimentos y sobre todo verduras y frutas? Estas son algunas medidas:
- Enseña a los niños a disfrutar de la comida. La hora de la comida es un momento especial por lo que un buen tip es que lo hagas participar en la preparación de esta y enseñarle a que ayude a poner y quitar la mesa.
- Otra buena idea es preparar los platos de forma especial. Con un poco de creatividad y buscando ideas en la web se pueden preparar los platos con formas divertidas. La combinación de colores y figuras es otra de las claves. Con platos atractivos, y además siendo participes, los niños se podrán animar a probar nuevos sabores.
- Es muy importante que como padres demos el ejemplo. Ellos imitan a mamá y a papá, comer de todo y hacer ejercicio es una buena pauta para que los niños también lo hagan. Somos los padres quienes debemos inculcarles el gusto por probar nuevos alimentos y sabores.
- Nunca debemos utilizar la comida como premio o castigo. El niño debe relacionar la hora de comer con un momento especial y agradable del día. Nunca hay que usar la comida para premiarlos o castigarlos.
- Crea buenos hábitos alimenticios para que el niño adquiera una buena relación con la comida, es decir, que coma sano, que los alimentos sean caseros y naturales, que no se salten ninguna comida y enseñarlos a que de esta manera crecerán saludables.
- Si el niño no quiere comer un día, no pasa nada, no se les debe obligar. No debe ver la hora de la comida como un tormento.
- Evita que coma dulces o snacks poco saludables entre comidas. Es muy importante que los niños tomen tentempiés sanos y ligeros como frutas o verduras picadas y que no consuman golosinas entre las comidas. Enseña a tu hijo a comer bocadillos saludables.