
La educadora Amy Adkins dio una charla en las conferencias TED en las que explica de que manera podemos buscar tener más confianza en nosotros mismos.
Adkins afirma que cuando tenemos en frente un gran desafío, hay personas que nos pueden llegar a decir “ten más confianza”, y que probablemente pensemos “Si fuera así de sencillo”. Pero ¿qué es la confianza?, es creer que somos valiosos y capaces, también se le conoce como autoestima, y si a esto se le agrega el optimismo que se despierta cuando uno está seguro de sus capacidades, uno consigue ser valiente para enfrentar el desafío. Eso es confianza, convertir los pensamientos en acción. Entonces, ¿de dónde viene la confianza?, hay varios factores que influyen en la confianza. Primero, los genes con los que naciste, que afectarán cosas como el equilibrio de los neuroquímicos en tu cerebro. Segundo, la forma en que te tratan, esto incluye las presiones sociales de tu entorno. Y tercero, la parte sobre la que tienes control, las decisiones y riesgos que tomas, cómo piensas y respondes ante los desafíos y contratiempos.
No somos responsables de todos factores, pero el tercer factor, que son las decisiones personales, ciertamente desempeñan un papel importante en el desarrollo de la confianza. Por lo tanto, teniendo en cuenta esto, en realidad tenemos el poder de cultivar nuestra propia confianza.
Consejo 1: Hay algunos trucos que pueden darte un impulso inmediato de confianza a corto plazo. Imagína tu éxito al comenzar una tarea difícil, escucha música que te inspire sentimientos de poder, date una charla a tí mismo.
Consejo 2: Cree en tu habilidad para mejorar. Si buscas un cambio a largo plazo, considera la forma en que piensas sobre tus habilidades y talentos, ¿crees que son fijos al nacer, o que pueden desarrollarse como un músculo?, estas creencias son importantes porque pueden influir en cómo actúas cuando te enfrentas a los retos. La neurociencia apoya la mentalidad del crecimiento. Las conexiones en el cerebro se hacen más fuertes y crecen con el estudio y la práctica.
Consejo 3: Aceptar el fracaso. A veces vamos a fallar, todos lo hacen. JK Rowling fue rechazada por doce editores diferentes antes de que uno le aceptara a “Harry Potter”. Los estudios demuestran que aquellos que fracasan y continúan intentando, están mejor equipados para responder a los desafíos y contratiempos de manera constructiva. Aprender cómo probar con diferentes estrategias, pedir consejos a otros y perseverar.
Entonces hay que pensar en el reto que quieres asumir, comprender que no va a ser fácil, aceptar que puedes cometer errores y ser amable contigo mismo cuando lo hagas. La emoción que sientas, sea cual sea el resultado, es que habrás adquirido un mayor conocimiento y comprensión, esto es confianza.
