Generalmente la cama es el foco principal de un dormitorio y junto con ella está la cabecera o pared en donde se encuentra la misma. Para darle un mayor protagonismo se puede optar por elegir una cabecera original, fuera de las versiones clásicas, así como también aprovechar la pared que está detrás para crear un espacio alegre y diferente que resulte en la estrella de la habitación.
Las ideas son muchas, algunas puedes hacerlas por ti mismo. Estas son algunas propuestas para echar a andar la imaginación.
Para un cabecero 100% original puedes buscar una puerta vieja o antigua y restaurarla, pintándola del color que más te guste y le darás nueva vida a la cabecera de tu cama.
¿Qué tal un espejo que acapare todas las miradas? Esta propuesta además tiene la ventaja de que hará tu dormitorio un lugar más iluminado y aportará una mayor sensación de amplitud al espacio.
Nada más original que una barda de jardín para decorar tu cabecera y para darle un toque romántico puede pintarse de color pastel mate.
Otra linda opción es un bello cuadro pintado en la pared de la cabecera como si fuera un mural con imágenes que nos inspiren como este estilo marinero. También los vinilos pueden funcionar muy bien para esta idea.
Otra gran idea es empapelar la pared del cabecero. Hay muchísima variedad en papeles tapiz, así que, si prefieres decorar con algo que aporte textura y color a tu habitación, esta opción es para ti.
