
Antes la mayoría de los padres dejaban que la escuela se encargara de hacer leer a los niños, muchos no se involucraban en cuanto al tipo de libros o simplemente esperaban que cuando aprendieran a leer, ellos, por su cuenta, tomaran un libro y empezaran a leer.
No es de sorprender que, en nuestra generación, el hábito de la lectura no haya echado raíz, es por esto por lo que es de suma importancia que sea aprendido desde casa y no hace falta esperar a que los niños sepan leer o escribir, por fortuna, muchas casas editoriales han adaptado libros para entretener a todas las edades. Aquí encontrarás algunos consejos en como fomentarlo de manera sencilla y didáctica.
Siempre ten libros en tu casa que sean adecuados a su edad, que sean llamativos y tengan dibujos muy entretenidos. Ellos deben familiarizarse con los libros como objetos de uso de todos los días, con esto, ellos aprenden que leer es un placer y no una obligación. Destina un lugar apropiado para ponerlos, que te ayude a acomodarlos en el orden que más le gusten y que vea que siempre están a su alcance.
Procura leerle en voz alta al menos 15 minutos al día, esto puede ser en la noche, antes de acostarse y lo puedes incorporar como parte del ritual de irse a la cama. Cuando le leas un cuento, trata de hacerlo sonar divertido, puedes hacer efectos especiales con sonidos y cambiar la voz de diferentes formas cuando sean diversos personajes, si te sientes aventurera hasta puedes actuar algunos pasajes del cuento e invítalo a participar.
Siempre que terminen el cuento, pregúntale si le gustó y cuál fue su parte favorita, comparte con tu hijo tus partes favoritas para animarlo a comentarlo. Te puede pasar que se enamore de un libro en particular y siempre quiera leer el mismo cuento, va a llegar un momento que te vas a frustrar por qué no quiere uno nuevo y tú ya te lo sabes de memoria. Esta es una etapa normal y pronto pasará, en realidad vas por buen camino ya que estas haciendo que le gusten los libros y la repetición les da confort. Cuando ocurra esto, lo que puedes hacer es decirle que sí van a leer el cuento de siempre, pero que primero le vas a leer uno nuevo antes del libro favorito, así conocerá otras historias y que después vendrá el cuento de siempre. En poco tiempo agarrará otro cuento favorito, simplemente repite el proceso. Llegará un momento que te va a decir que quiere un libro nuevo porque ya conoce todos los que tiene.
Algo muy importante es predicar con el ejemplo, trata de leer en tu casa todos los días y procura que el niño te vea haciéndolo, verás que pronto te va a imitar. La lectura abre mundos maravillosos donde los pequeños pueden desarrollar su imaginación y es un momento extraordinario que puedes compartir con ellos al final de un largo día.
